lunes, 10 de febrero de 2014

"Mi experiencia con la Arteterapia Hauschka II"

Muchas gracias a esta alumna y a todas las demás por dar lo mejor en cada taller. Gracias por tu testimonio, y por contribuir con tu ejemplo y experiencia a que otras personas conozcan la Arteterapia:


"Cuando se llevan varias semanas sin pintar ... ¡qué triste parece la vida!
Pues sí. Es una vida carente de ese aporte de energía y calidez con el que mostramos nuestra parte más íntima y profunda.
Y qué triste resulta no-expresar nuestra verdadera esencia a través del color ya que a través de las palabras pocas veces nos atrevemos ...
En nuestras vidas siempre hubo color, pero yo personalmente, hasta que empecé a emplear la técnica de expresar sentimientos de los que ni yo misma era consciente, no sabía hasta qué punto la técnica del color había calado en mi.
Pues sí. Caló.
Y me encantan las huellas que dejó.
Y los pequeños descubrimientos y sorpresas que consigo arrastró.
Me gustaban las tareas de pintura que nos encomendaban en el taller de Arteterapia y siempre sorprendían y se afrontaban con ilusión.
Me gustaba compartir ese tiempo con mis compañeras, cada una sumergida en lo nuestro pero a la vez bañadas todas por la misma agua.
Me gustaba el tiempo de silencio en cómplice camadería con todas ellas.
Me gustaba ese intercambio de miradas,sonrisas o estados anímicos sin palabras.
Me gustaba la puesta en común del trabajo realizado en que una forma de color cobraba de repente un sentido que antes no se percibía. Todas esas formas tenían su encanto.
Me gustaba marcharme para casa con las huellas de las témperas, las acuarelas, las ceras ... en mis manos, incluso cuando utilizamos barro, pues con barro en mis uñas.
Me gustaba manchar la ropa o, incluso la cara, con una brizna del color usado.
Me gustaba ir por la calle con esa sensación cargada de energía y la satisfacción por la jornada.
Me gustaba lo que se lograba transmitir según el color que se  quisiese usar ese día de trabajo.
Me gustaban esas dos horas que siempre se quedaban cortas.
Me gustó descubrir el encanto del amarillo.
Me gustó comprar pinceles y demás material para seguir pintando.
Me gustó la maraña de descubrimientos y sensaciones que había cerca e incluso en mí.
Me encantó pintar el mural todas juntas el último día, y la camadería y buena onda que allí se respiraron.
Me encantó conocer a Elena y a Ismael, y que fueran ellos quienes abrieran la puerta a ese mundo del color.
Me gusta que esa puerta siga permaneciendo abierta en mi vida y no quiero cerrarla nunca.
Si la cierro, empobrezco y menguo. Y yo quiero seguir creciendo y recogiendo frutos ...
Gracias por esta experiencia."
                                                                   R.C.

3 comentarios:

  1. Muchas gracias a tí por tu entusiasmo. Esperamos contar contigo en próximos talleres. Un beso

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  2. Precioso testimonio!!! Os lo meréceis, sin duda. Me alegro que sigáis cosechando tanto éxito con vuestro maravilloso trabajo. Un beso muy gordo de tu antigüa alumna y amiga.

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